CLICK HERE FOR BLOGGER TEMPLATES AND MYSPACE LAYOUTS »

viernes, 30 de abril de 2010

Mmm. ¿Por qué querría arriesgar mi tranquilidad para entregarme nuevamente a quién destruyó con sus propias manos más de una vez el mundo que construimos con el alma? Me suena a tontería. No es que no sienta cada palabra que dices, más bien te conozco más que tu misma, y lo sabes. ¿O vas a negarlo?

¿Comprendes que aunque me des “razones” para confiar nada cambia? ¿Entiendes que lo hecho hecho está y que nada de lo que digas puede cambiar eso?

Es algo más allá de la rabia y la pena que pueda sentir por todo el daño ocasionado. Es conmigo, por permitir que todo esto sucediera, por encontrarme donde estoy, cuestionándome todo esto, sabiendo que probablemente debería correr…o mejor dicho correrte de mi vida. No lo digo con rencor, sino más bien tomando conciencia al fin. El tema no era yo, no era otra, eras tú. Siempre fuiste tú quién corre y corre sin saber por que, quien daña “sin querer”, quien no sabe por que actúa “como” mala persona. ¿Lo entiendes? Probablemente llorarías. Te molestarás sin duda, lo sé. Lo siento, no me importa. Es lo que siento. No quiero decirte todo esto, prefiero escribirlo. Porque ¿para qué volver al mismo tema, sobre todo si me has dicho y sobre todo demostrado una y otra vez lo arrepentida que estás. Si te hace daño, para que seguir. Pero lamentablemente yo no he podido con esto. No puedo, no lo supero, no lo perdono. No jugaré a la enamorada feliz. Yo te amo, sin duda, sin embargo te amo de otro modo. Jamás con la misma devoción que ayer, jamás. No serás para mí aquella pequeña, dulce inocente de mirada perdida. No sabes cuanto me apenas esto. Si supieras. Si supieras como me gustaría no sentir la angustia que siento cada vez que me dices algo hermoso y me dan ganas de alejarte y decirte que me dejes porque no te creo nada, porque no confío. Oírte decir que me amas es un arma de doble filo en este momento. Resiento tan desafortunada. En mis manos está nuestro destino, y yo solo pienso en como sanarme. En dejar atrás esta etapa de mi vida que me limita en todo sentido. Que me ata a mis mayores miedos, que me hace llorar cada noche. Lloro porque te alejo, por que a pesar de desear más que nada estar contigo no quiero comprometerme. No quiero que tomes mi mano. Me duele decirte que me dejes, que no me busques, que me cansé de ti…me duele porque en parte es así. Porque no tuve más paciencia, porque ya no puedo arrastrarme por ti, y aunque eso sería patético era más fácil ser aquella tonta absurda que te esperaba con los brazos abiertos luego de tus escapadas.

No sabes la pena que siento por lo sucedido esa noche que debía ser la más romántica del mundo, luego de que me prometieras abrazarme para no soltarme más. Esa estación para mi nunca volverá a ser una más. Cada vez que paso por ahí se me apreta el pecho de angustia. Sabía que algo estaba por suceder...pero esperé y esperé por que presentía que algo andaba mal…terminé abandonando ahogada en lágrimas aquel lugar en el cual fui feliz por interminables minutos, mientras armaba castillos de arena para las dos…mientras pensaba las palabras perfectas para profesarte mi amor. No sabes cuanto me culpé luego por haber creído en ti una vez más. Pero lo perdoné sólo por lo que estabas por hacer por mí. Porque era mejor que cerraras ese capítulo de una vez y fueras sincera y así poder volver a sentirte en mí como ayer. No podía echar por la borda esto luego de lo que significó para ambas esa noche (L) en que nos volvimos a mirar a los ojos, nos abrazamos sin querer soltarnos intentando disimular el dolor sin lograrlo estallando ambas en lágrimas. Nos amamos nuevamente y era imposible olvidarlo…por eso luego de un rato me tragué las lágrimas prometiendo intentar no juzgarte, deseando que resolvieras luego el embrollo en el cual nos tenías.

Ha pasado tiempo, he intentado sanar. Día a día me he dicho “ha vuelto por ti, es lo que querías, no juzgues mas y disfruta la vida”… sin embargo el dolor no desaparece. No puedo hacerlo. Ha pasado tiempo y aun me apena no creerte capaz de protegerme. Me cuesta olvidar todo lo sucedido. A veces recuerdo que revelaste cosas que no debiste, y que además las cosas no era tal como las dijiste y a fin de cuentas me humillaste sin sentido. ¿Tú crees que no me gustaría olvidar todo esto y decir ya, ok, te perdono? No te puedo decir que te perdono si no lo siento. No se si exista forma de volver a confiar en ti :/ pero me encantaría intentarlo… :/

No quiero vivir con la sensación de que me tuve que alejar de ti odiándote. Ya te quiero. Ya me es imposible dejar de hacerlo, más allá de si deseo o no estar contigo como una pareja el cariño no va a desaparecer. No me importa si estamos o no, me importa sanarme. Me importa sentir más amor que odio…no quiero odiar a nadie :/ menos a quien le tengo tanto cariño. No quiero ser una mina resentida que nunca superó su dolor. Por eso, si de verdad me amas como dices, te pido que por favor intentes entenderme. Desearía con todo mi corazón poder decir "te perdono", pero hasta que así no sea no lo haré :/ ni menos me ataré a algo en lo que no creo. Eso…no me voy a arriesgar esta vez hasta no sentir un cambio en mí. Te quiero, te adoro, eres maravillosa…sólo que probablemente aun no te has dado cuenta.

jueves, 29 de abril de 2010

:)
hoy cariñé tu carita
y te miré los ojitos y te dije cuanto te amo
y sé que tu estabas abrazándome y diciéndome también lo mucho que me amas
y que me esperas en un lugar hermoso donde nos abrazaremos para no soltarnos jamás :)

el amor que siento por ti me hace vivir

te extraño tanto
te necesito tanto

miércoles, 28 de abril de 2010

Escribo para desahogarme, para sentirme viva, para poder dormir. Generalmente las palabras fluyen en corriente incontenible. Hoy me siento distinta. No he sentido ganas de llorar, aunque probablemente eso sea lo único que me quede por hacer. Algo ha cambiado, finalmente los cambios si existen. Me siento tan ambivalente, pero estoy feliz, he descubierto que soy feliz. No se si esto comenzó hoy, o si sólo es el día en que logro tomar conciencia. No se si entiendas lo que significa todo esto, y comprendo que así sea pues yo a ti nunca he logrado comprenderte del todo. Hay veces en que incluso aborrezco lo que haces, siento que me duele profundamente y te desconozco. Probablemente no sea tu culpa, simplemente es. Hoy no me dolió tu llanto, me dolió más el recuerdo de mi debilidad constante frente a repetidas situaciones autoindulgentes. No se por que lentes has decidido mirar el mundo hoy. Hace harto que todo es tan distinto a esos tiempos de amor incontenible. El amor se apaga cuando eres descuidado. El respeto se pierde cuando desaparece la confianza. El dolor se hace insoportable cuando todo parece incontrolable. He perdido el control, mi cabeza y mi corazón ya no trabajan en sintonía. Es mejor, de este modo no me engaño. He estado mucho tiempo con las manos amarradas y los ojos cubiertos y ya no se siente bien. Mi corazón se encuentra herido como nunca sin embargo siento que salgo a flote. No quiero victimizarme pero sin duda me he sometido suficiente. Masoquista empedernida se toma días libres por la carencia de sentido de su actuar. Es tan extraño este nuevo modo. Nunca he sabido cuidarme, me es ajeno pero deseo intentarlo, por primera vez se siente bien.

“Piensa en lo malo”. También lo pensé. Puede que funcione, pero eso tampoco opaca mi sentir. Aunque probablemente sea lo único por hacer para ser concluyente y asertiva. No me gusta pensar que hay cosas “malas”. No me gusta juzgarlo todo pero me es inevitable. Odio la cobardía, la poca honestidad y falta de sinceridad, las mentiras sin sentido, los miedos irracionales, las burdas maquinaciones y manipulaciones, la falta de amor y ternura, el dedito de frente. Lo odio con todo mi corazón, me provocan nauseas, pero el paquete lo incluye todo en uno. O lo tomas o lo dejas. Siempre lo tomé pues lo bueno uuf…como explicar lo maravilloso… todo lo emprendido, lo que siento con sólo pensarte o saber que existes. Que manera tan irracional de amarte. De excusarte y justificarte. De creer que algún día todo seria mejor. De soñarte, de desearte sólo a ti y a nadie más porque NADIE y NADA se comparaba contigo. Que manera de cambiar para bien. De aprender a ser leal, de aprender a tratar, a contar hasta 10. Y que manera de arrastrarme también, de dar pena, de sentirme patética. Que manera de ser humillada, de hacerme sentir vergüenza y de sentirme poco digna de ti. De sentirme poca cosa, de buscar motivos para ser amada, de querer ser más para ti.

Tal vez no comprendiste porque te escribo noches completas, no percibiste mi devoción por ti. Las miles de lágrimas derramadas sólo por respirar el mismo aire, en cada beso, en cada abrazo. Si sintieras en la magnitud que yo siento tu cuerpo no aguantaría. Es probable que mi amor por ti se compare con tu dolor, he ahí el porque no conectamos del todo. Nuestras frecuencias se esquivan a ratos y el equilibrio se pierde amenazando con dejarnos para siempre. Siempre ha sido así. Y ya no quiero que me abandones. El dolor me supera, por eso prefiero dejarte. El miedo y la inseguridad me han superado, y también el amor propio ha triunfado al fin. Nunca quise que esto fuera así pero así terminó la cosa. Llegaste un poco tarde y aunque te extraño y siento me gustaría continuar a tu lado no me quiero involucrar en un torbellino desbocado sin comienzo ni final.

Menos mal nadie pasa por aquí.

martes, 27 de abril de 2010

no es lo suave lo que me hace temblar...es tu risa

Reconozco palabras desinteresadas como besos perdidos asume mi alma, y tus palabras retumbaron una y otra vez en mi oído como un relámpago que me hizo temblar por completo. Este sentimiento inunda hasta lugares desconocidos por mí. Fue algo tan inesperado que quebré en llanto de emoción. Tanto tiempo sintiéndome amando sola. Tantas noches te sentí en la soledad que me apresaba, en la oscuridad de ese espacio que guardaba para ti, más que como un recuerdo como una sombra que siempre se escondía amenazando con volver. Hoy vuelves a mi como ese ave que alguna vez voló firme y ferviente por mis manos. Recaigo en ti esta vez. No me dañes el alma como has hecho trizas corazones en pugna. Lo que ayer abrazos regalados fueron, abrazos bien sentidos y entregados hoy serán.

lunes, 26 de abril de 2010

Para una princesa extraviada

Anoche soñé con un ángel enfermo, de ganas de amar y ser amado. Ese que enfermo de celos agonizó por mí entre mis brazos desnudos y otras veces muy bien vestidos. Aquella inmaculada bestia que muchos atardeceres cantó, y danzó en los aires para mí, sólo por mí. ¿Que fue de aquella hermosa irracional? Tal vez nunca lo sabré. A veces la extraño más de lo que me gustaría. Hoy por ejemplo, recordando lo que experimenté en un estado amplificado de conciencia, me siento carente de tu ausencia distante. Me hace daño pues está muy presente a pesar de mi dificultad para comprenderlo. Tal vez si te hubiese comprendido sólo un poco más de lo que decidí protegerme. Me dañaste, me heriste. Aniquilaste mis posibilidades de sentir lo que corría por mis venas. Tan poco amor que nos dimos y tanto amor nos deseamos. Nunca sabremos, mas fue mejor, tú desconoces y yo te olvido. ¿Será posible tanto afán? Cuanto dolor habrás de haber sentido para odiar tanto al alma pura que te cobijo tanto el alma como el cuerpo, entre desbaratos sazonados de azúcar y sal por montón.

Abro mis ojos, feliz. Siento el aire entrar y salir de un modo que hace que la biología parezca sencilla. Es cosa de cada día. Si me abstraigo de lo evidente siento la brisa suave colándose entre mi pelo, rodeando mi piel con cálidos roces. Su aroma me embriaga y me recuerda lo afortunada que soy en ese preciso instante. A veces tiendo a decaer, al igual que ella. Cuando comprendo que no todo es tan simple. Cuando recuerdo que soy parte de un problema matemático de difícil resolución. Mi vida siempre ha sido así. Un par de incógnitas para acá y una cruda verdad para allá. Me harto de mi indecisión ¿o será más de las decisiones equivocas que tomo? Tal vez no exista decisión alguna. Ayer sonreía y hoy también, mañana probablemente también lo haré. Me siento afortunada de respirar el mismo aire que inhalamos las tantas veces que nos miramos con los ojos bien cerrados, y otras cuantas entre abiertos. A veces no puedo evitar las ganas de amarme. De amarme tanto más que lo que te he amado todo este tiempo. Exenta de culpas la flor descansa, cuando se engaña y cierra sus ojos con intenciones de no despertar. Es más lindo de este modo. Nos callamos y disfrutamos del silencio. El silencio nunca es suficiente ¿no es verdad? Aunque nos guste creerlo, nos hace sentir peor cuando es contrastado con el barullo de las urbes que habitan en ti y en mí. Esas que gustan de compartir a ratos, mientras en otros desatan guerras interminables con finales que poco prometen. Nos mezclamos, de uno u otro modo siempre terminamos por fusionarnos, y sin importar si nos hace bien o mal corremos riesgos sólo por la necesidad de vibrar.

lunes, 19 de abril de 2010

Es tan extraño que todo sea tan "normal", de normalidad nunca se trató lo nuestro. Sin embargo, hoy se siente bien. Cuando nos miramos como siempre, sabiendo que nos pertenecemos a pesar de todo lo dicho y hecho. Yo juego a que me creo y a que me creas. Tu lo sabes y no dices nada, porque sabes cuanto te amo, y te entregas al sentir. Tu me amas sin necesidad de hablar. Es deseo lo que exhalamos en cada movimiento dirigido indirectamente. Es más que eso, no hay palabras, y no importa. Somos dos, no dejamos de ser como ayer. Retomamos un camino construido entre guerras y fiestas dionisíacas, entre primaveras e inviernos cada vez más fríos que los anteriores. Y hoy en pleno otoño florecemos aunque paresca absurdo. Somos brisa fresca, rocio al amanecer, de esto que parece increible e irreal. Tu eres cálida y sutil como nunca, yo camino a paso más lento y te siento a pesar de la distancia. Hoy no dejamos de ser, hoy nos dejamos ser. Y nos miramos igual que ayer, nada ha cambiado. Los rencores van quedando atrás, ya no hay más que juzgar, y ni importa a decir verdad. Somos lo mismo que fuimos cuando nos miramos y encantamos aquella noche. No sabes cuanto siento con cada mirada, con cada suspiro, cada vez que tu esencia invade mi interior y te siento en mí como ayer. Me hace querer intentarlo otra vez, ya no puedo negar mi sentir. Ya no me importa hacia donde nos dirigimos, incluso si no apuntamos hacia ninguna dirección está bien. Esta forma de ser y estar es perfecta. Tu esencia con la mia son perfectas. Te amo pequeña de alma incierta.

viernes, 2 de abril de 2010

Nunca ha sido facil. No lo es para mi y seguramente para ti es igual. Sin embargo hoy se siente mas dificil que ayer, a pesar de que el dolor me adormece cada dia un poco mas. No se que es lo que sientes realmente. Cuando tus ojos brillan por mi todo se siente tan real, me cuesta creer que pudiese no serlo, sin embargo las tantas vueltas que hemos dado a veces me hacen desear dudar. Tengo tanto miedo como ayer, y un poco mas de angustia que la que tendre mañana al despertar. Tu te pierdes entre las luces mientras yo me pierdo en una pequeña esfera sin entrada ni salida. Quisiera que fueses parte de ella para siempre, o tal vez todo lo contrario, realmente no lo se.

A pesar de todo lo que ha pasado, sigo sintiendo y pensando lo mismo cada dia. Sigo pensando que estos dias, si bien no han sido faciles, a ratos han sido realmente maravillosos. Esto que siento no hay forma de frenarlo, no creas que no lo he intentado. No logro encontrar un punto intermedio para lidiar con lo que esta pasando, estoy cansada y se que tu tambien lo estas. Y a pesar de todo el sufrimiento ocacionado quiero que sepas que si me aferre a tu mano todos estos dias ha sido por todo el amor que te tengo. Se que estas dolida, que seguramente crees que no te quiero tanto como digo ya que a tu modo de ver, si asi fuese, las cosas habrian sido distintas. Creo que la experiencia nos dice que finalmente las cosas no son tan asi. Solo puedo asegurarte que yo no me engaño ni me miento. Siento tanto lo sucedido, por ti y por mi. Necesitamos descanzar, sin embargo dejo abierta la puerta por si quieres retomar este camino que hace harto comenzamos. Hemos intentado tanto cada tantas lunas que creo que nos merecemos intentarlo.
No temo mas de lo que he temido hasta ahora...
(no puedo poner los acentos k9)